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LA TERCERA OPORTUNIDAD

Perdimos la primera oportunidad. El Cabildo de la Catedral , el mismo que fundase Cajasur, la sentenció a muerte. Una defunción causada por una pésima gestión, por la nefasta política de empleos, por la temeraria inversión en el ladrillo, por el pernicioso personalismo de Miguel Castillejo, presidente de la entidad durante treinta años y que se retiró con una pensión vitalicia millonaria, al que el Banco de España deja fuera de la investigación a pesar de tanta irresponsabilidad. Parece mentira que uno de los cabildos catedralicios con más dinero y poder de las diócesis españolas, ni fuera capaz de fundar, siglos atrás, una universidad como se hizo en otras ciudades, ni ha sido capaz de dejar una Caja saneada y productiva al servicio de Córdoba y su provincia. Perdimos la segunda oportunidad. El mismo Cabildo apuntilló el último solplo de vida al negar la fusión con Unicaja. Su soberbia de perdedor no le ha permitido entregar la Caja al enemigo rojo, según su propio comentario.

Esto también es África

El pasado domingo, 11 de julio, el telediario de la 1 de TVE dedicaba más del 50 por ciento de su edición al mundial de fútbol y apenas un 3 por ciento de sus informativos al naufragio de una patera, que ha supuesto la muerte de cinco personas, de las que dos eran bebés y tres mujeres. ¿Tan necesitados estamos de euforias pasajeras, al mismo tiempo que deshumanizados, para dedicarles el menor tiempo a la trágica noticia que la Europa del bienestar, con su legislación sobre inmigración, provoca? Pues claro que me divierte el colorido y la emoción que genera un final deportivo de este calibre, y más, si gana España. Sin embargo, me embarga la muerte evitable por el ser humano. En este caso, mientras una parte de Africa nos llevaba a la máxima gloria deportiva, otra seguía desangrándose en sus orillas. En este caso dos bebés no llegarán a hacerse niños, ni jóvenes entre nosotros, a causa de la miseria humana. Una moneda con dos caras: la del empobrecimiento de sus países y la ri

LA VERDE

El parlamento andaluz está celebrando una serie de actos institucionales con motivo del 125 aniversario  del nacimiento de Blas Infante, padre de la patria andaluza. Dentro de un mes se cumplirán los 74 años de su fusilamiento en la carretera de Carmona por los golpistas fascistas del 36. Estos acontecimientos nos tienen que traer a la memoria nuestro recorrido como nacionalidad histórica, que tuvo sus momentos más álgidos en las manifestaciones celebradas el 4 de diciembre de 1977 y en el referendum del 28 de febrero de 1980, en el que el pueblo andaluz votó por una autonomía de plenas competencias, a través del artículo 151 de la Constitución, equiparándonos a Cataluña, Galicia y País Vasco. Hoy cuando veo ondear en balcones y ventanas centenares de banderas españolas como señal de identificación con la “roja”, por el éxito deportivo que está cosechando, echo en falta la verdiblanca, que nos identifica con nuestra tierra. Fuensanta Coves, Presidenta del Parlamento autonómic

Ni antes ni ahora

Como ciudadano me pregunto ¿cuáles son las causas de la crisis económica? No voy a caer en la ingenuidad de señalar como único responsable al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de la grave situación que estamos atravesando. Además, pienso que si el PP estuviese gobernando los recortes sociales los padecerían aún más, sin ninguna duda, los sectores más empobrecidos de la población. Sin embargo, para los dos partidos políticos mayoritarios no ha sido prioritaria la erradicación de la exclusión social. Durante los últimos 20 años los datos sobre empobrecimiento y exclusión social se han enquistado. Sólo basta con mirar el VI Informe Foessa que vuelve a desvelarnos la dura realidad de la pobreza y la exclusión social. Su conclusión es bastante preocupante: a pesar del proceso de crecimiento económico registrado en España en la última década, los índices de desigualdad y de pobreza no han disminuido. La pobreza sigue afectando a una quinta parte de los hogares españo

Yo tambien puedo ser un enfermo

Durante estos últimos días me siento profundamente consternado al saber que un grupo de vecinos de la zona de la avenida del Aeropuerto se han manifestado para mostrar su rechazo a la apertura de un centro de salud mental, perteneciente a la Fundación Andaluza para la Integración Social del Enfermo Mental, en un edificio anexo al ambulatorio de la avenida del Aeropuerto. Según estos vecinos, dicho centro genera inseguridad ciudadana y no es el lugar más idóneo para ubicar esta instalación, debido a la cercanía con varios colegios y áreas de ocio. Llegaron a manifestar que los padres ya no vamos a poder estar tranquilos de que nuestros hijos jueguen en la calle porque no sabemos cómo pueden reaccionar este tipo de personas. Esperemos que estas personas que padecen tal enfermedad y sus familiares no se vean amenazadas en un futuro por unos ciudadanos educados en el temor y el miedo a lo diferente, a lo distinto, en este caso, padecer una enfermedad. Vuelven a aparecer en nuestra

LA FERIA PASADA POR CAJASUR

Buen jueves de feria. Una feria que esperábamos pasada por la crisis, que también se nota, y sin embargo está pasada por la intervención de Cajasur. Mis paseos por el Arenal me hicieron topar con la fachada de la caseta en la que se exhibe la paloma hierática y desplumada, que nada tiene que ver con el símbolo que los antiguos cristianos pusieron a la tercera persona del Dios trino. Inmediatamente pensé: 1.- ¿Por qué la Diputación Provincial , gobernada por el PSOE, dejó absorber su Caja Provincial de Ahorros en 1996 por Cajasur? 2.- ¿Por qué los contribuyentes tendremos que pagar el agujero de los 596 millones de euros que Cajasur, por la pésima gestión, generó en 2009; más los 154 del primer cuatrimestre de este año? 3.- ¿Por qué al cabildo no le importa para nada la cohesión financiara de Andalucía; y lo que es más grave, no le ha preocupado los efectos colaterales que la intervención de Cajasur tiene para Córdoba? 4.- ¿Ante quién se van a confesar de tanta soberb

Desvelar

Como profesor de Instituto me planteo ¿qué pasaría en mi centro si una chavalita que profesa la religión musulmana asistiese a clase con hiyab? Confío que el sentido común llevase a la comunidad educativa a no imponer sanciones a dicho hábito y mucho menos a la expulsión del centro. Aporto cuatro pequeñas reflexiones que pretenden dar luz a un debate que en muchas ocasiones, y por desgracia, conducen a actitudes xenófobas, en las que lo que menos importa es la dignidad de la propia persona y su realidad familiar. Habría una primera consideración política. Nuestra Constitución en su artículo 16.1 garantiza la libertad ideológica, religiosa y de culto; y en el 16.2 proclama la aconfesionalidad del Estado. Ante lo cual no podemos mirar las simbologías, en este caso religiosas, como un atentado constitucional. En cambio, sí lo es que en los institutos, escuelas públicas y centros concertados subvencionados con dinero público se estén impartiendo clases de religión. El adoctrinamiento